Cuento Astrológico de Verano II

Cuando cerré el libro, de pronto me di cuenta que alguien estaba enfrente, sentado tranquilamente en mi sofá. No esperaba a nadie, y menos a una hermosa dama en bikini.

—Soy Quirón, tranquilo. Ya te dije que volvería.

—¿Quirón? Diría que la última vez no eras una mujer, sino más bien algo siniestro.

—Puedo adoptar mil formas, pensaba que esta te gustaría más. He leído tu novela, y me ha hecho pensar que eres un pervertido.

—Bueno, hay escenas eróticas. Pero eso no significa… Alguien me aconsejo que…

—Ya. Lo importante es que te aproximas a cómo pueden ser las cosas a mediados de siglo. Así que a partir de ahora, cada vez que influya a alguien con mis tránsitos, se la meteré en la cabeza… https://www.amazon.es/Como-si-no-hubiera-ma%C3%B1ana/dp/1095008692/

—¿En serio? Pues muchas gracias.

—Pas de quoi. La fecha que te dije, la de la siguiente crisis bancaria, es a finales de octubre. Aunque tal vez pase de nuevo desapercibida, como la de julio. O puede que no ocurra, los humanos a veces sois impredecibles.

—Quizás no sea tan grave como piensas.

—Quizás. Tenga o no gravedad en octubre, no será la última. Pero lo peor es que a la gente no le interesa. Parece que no entienden que, si estoy en lo cierto, quizás pueden aprovecharse de esta información. Que quizás deberían preguntarse, si esto va a más, qué deberían hacer por si acaso. Que quizás pueden hasta hacerse ricos. Chi lo sa.

—Bueno, supongo que pensarán que eso no es importante.

—Quizás.

Y de repente desapareció, como en una nube.